Ver a Tamara Farías Vergara disparar a quema ropa, sin advertencia los tres tiros a un
vigilante del Bancoestado de Estación Central me llenan de asco, de un asco con
gusto a reproche tanto a los grupos anarquistas como a las autoridades
político-judiciales-policiales chilenas.
Tamara Farías al ser llevada a su audiencia de formalización |
Cuantas veces
desde hace 10 años atrás los skinhead lo dijimos, yo mismo lo dije en varios
artículos entonces, que los punk anarquistas y casas okupas eran el kindergarten del futuro terrorismo de
izquierdas y sin embargo entonces los noticieros y el sistema judicial colocaban
a los esbirros anarquistas como víctimas.
Ahora esas
víctimas colocan bombas, asaltan bancos, disparan a personas y los noticieros
no ocupan ni 2 minutos para informar como Tamara Farías disparo a un inocente
trabajador en venganza por la muerte de Sebastián Oversluij Seguel y nada mas.
De venganza
política claro está, porque el Vigilante del Bancoestado de estación central no
tiene más
vínculo con la muerte de Sebastián Oversluij que trabajar en el mismo
oficio, en la misma entidad bancaria, sin otra conexión. Un inocente que
recibió el odio de una mujer llevada por su ideología, por enviar una amenaza a
otros vigilantes, al banco, a otros bancos, a la sociedad, en fin un acción con
motivaciones absolutamente políticas de causar terror, terrorismo.
Sebastián Oversluij, inicio del asalto al Bancoestado Pudahuel, la gente se arroja al suelo ante sus amenazas. |
No solo
terrorismo es hacer explotar un artefacto, no solo terrorismo es disparar a un
dignatario, ni hay que ser fundamentalista religioso o pertenecer a un grupo
reconocidamente terrorista, no hay diferencia entre disparar a un policía, un
político o a un trabajador si las motivaciones son políticas. Digo esto porque
seguramente los abogados de la mal llamada defensoría popular (que solo
representa a personas de un sector) va a querer dar otra imagen, recurriendo
quizás a que justificación emocional para que el caso no sea tomado como
terrorismo.
Y
lamentablemente los jueces suelen ser de mano blanda con estos joven llevados
fanáticamente por su ideología, quizás paternalistamente pensaran que son niños
equivocados pero idealistas, no sé; pero el terrorismo es terrorismo, sin
importar el ideal, si es de izquierdas o derechas, si se es joven o maduro;
paradójicamente la mayoría del terrorismo busca un mundo mejor sea la libertad
absoluta en el anarquismo, la emancipación separatista Eterra, la búsqueda de
la justicia social de la FARC, etc. y sin embargo ningún fin idealista
justifica matar inocentes.
Es increíble la
justificación de ciertos actos realizados por algunos, cuando se rechaza los
actos de otros
solo por sus ideas distintas, con una imagen de sí mismos como
mas elevados moralmente que el resto, incluso monopolizando lo que es bueno o
malo sobre el resto de la sociedad. Lo gritos “Te queremos solcito, estamos
orgullosos de ti”, “arriba los que
luchan” hechos por familiares y amigos de Tatiana Farías al ser llevada por
gendarmería a su celda o la agresión de anarco-punk a Carabineros a las afueras
del juzgado, como si su detención se tratara de un acto injusto o que la acción
de Tatiana fuera un acto loable.
Luciano Pitronello en su formalización en el Centro de Justicia. Finalmente la sacaría barata, fue condenado a 5 años de LIBERTAD vigilada. No se le aplico La Ley Antiterrorista. |
No voy a decir
que el anarquismo en si es malo, perverso o intrínsecamente violento, no lo
puedo decir porque simplemente no es así; puedo decir que el anarquismo es en si
bien intencionado, busca las libertades individuales y la abolición de las
estructuras autoritarias sociales, pero para mí es equivocado en sus
planteamientos; nada malo es tener mayores libertades individuales y disminuir
el autoritarismo, que la mayoría de las veces es realizado por una elite que
les interesa su provecho propio por sobre las personas, pero no me parece la
abolición de las estructuras sociales y en algunos casos me parece hasta
antinatural abolir ciertas formas de organización humana. Por otra parte el
anarquismo ha dado al pensamiento diversidad de herramientas que a su vez han
formado otras ideas, algunas incluso opuestas como el anarco-liberalismo o no
tanto como el neobasimo; y causas en la que ha despertado conciencia como la
llamada “Liberación Animal”, que ha visualizado transversalmente el deber de un
trato ético a los animales.
Pero hablamos de
ese anarco-comunismo, esa masa informe de odios hacia todo lo que signifique
autoridad, ya decía Ernesto Guevara que
el “Odio es la principal motivación de la lucha revolucionaria” y en los
casos de muchos anarco-comunistas se da con elocuencia casi patológica. Ese
odio por odio, ese odiar como emoción motora de lucha, porque no se lucha por
amor a la patria, ni por amor a la libertad, ni por amor a la sociedad, se odia
y ese conjunto de odios lleva a las acciones temerarias como el asaltar un
banco o decidir matar un vigilante.
Y digo
temerarias porque no puedo decir valientes, por ser irresponsables y sin
ninguna utilidad revolucionaria; tan irresponsables como muchos que apoyan
estas acciones desde un filtro irracional de sus ideologías, esa masa de izquierdas
termocéfalas viudas del marxismo y el allendismo extintos que aun moran en las
oscuridades de facultades, en el resentimiento de los que llaman “Alienados” a
todos lo que no piensan como ellos, como si el resto padeciéramos una especie
de enfermedad de cual solo ellos son inmunes.
Cuando fue la
muerte del anarco-comunista Sebastián Oversluij en el frustrado asalto al
Bancoestado de
Pudahuel, el cual recordemos portaba una subametralladora
Beretta 9mm, cuando primero se creía que era un asalto de delincuentes comunes
las redes sociales y las secciones de comentarios estaban llenas de elogios al
Vigilante de seguridad… solo basto que se supiera que el asalto tenia
motivaciones políticas para que apareciera un ejército de estas viudas allendistas
insultando y odiando al joven vigilante por haber dado muerte al asaltante, uno
de los argumentos mas repetidos era el que el Vigilante hubiera asesinado al
Anarquista defendiendo los intereses de los ricos, del banco y bla, bla, lo que
a su parecer lo convertía en un asesino por instinto y aun peor al haber sido
militar (aunque tuviera apenas 27 años) lo hacía blanco de todos sus odios
postgolpe. Como si esperaran que la
persona que por funciones, por contrato y ley se quedara impávido frente a un
sujeto con un arma capaz de disparar 600 tiros por minuto, que ponía en riesgo a
las personas presentes en el banco.
Subametralladora Beretta, Cal 9mm para los que la quieran conocer: Video Beretta en Acción |
Entre los
cientos de comentarios desafortunados y sesgados había uno que me llamo la
atención en el foro de Emol, era la de mi antiguo profesor de castellano allá
por los 80s, ahora venido a director de un colegio en Talca, su comentario
estaba lleno de odio hacia el vigilante, hacia los militares, a los que llamo
de todo, incluso supuso que el vigilante lo había matado bajo una supuesta “sed
de sangre” homicida, obviando claro que el desafortunado anarquista era el que
había entrado a la sucursal armado. Me llamo la atención que él hablara con
tanto odio y que en los 80s guardara para él sus ideas u opiniones,
precisamente en la época en que si se tenían un contexto ¿Cobardía? No sé; el asunto es que inicie un debate con él que
no dio a ninguna parte y al mirar su muro de Facebook me encuentro con una
llama a usar los fusiles, una cita al líder chino Mao para ser algo mas
preciso, ya que no recuerdo sus palabras exactas.
¡Pero cuanta
irresponsabilidad de sus comentarios! ¿Y cuántos otros comentarios como ese
debió leer o escuchar Tamara Farías ese día, los días y las semanas
subsiguientes a la muerte del anarquista en el fallido asalto de Pudahuel?
Uno de los afiches llamando a la guerra Social. ¿Guerra contra los trabajadores? debemos suponer por la acción de Tamara. |
Tengo la fortuna
de conocer a una mujer ex-FPMR, estuvo presa en los ´80s formo una hermosa
familia y no traspaso ningún odio; también conocí a un ex-Mirista, mi jefe en
el trabajo, que incluso perteneció a un brazo armado y hoy a formado una
familia sin odios e incluso es crítico de la izquierda actual.
Por lo que creo
que no es justificación para su actuarla tragedia familiar de Tamara Farías,
tragedia que le ha llegado de oídas además, pues a la muerte de sus tíos ella
no había nacido.
Simplemente no
me puedo imaginar a una persona llegar al banco pedirle a la víctima (el
vigilante)que le eche una cuidadita a la bicicleta, luego sacar fríamente un
arma de un bolso, apuntar a la cara de quien no le ha hecho nada ni a ella, ni
a su familia, ni a alguien que ella conozca, a una persona que segundos antes
la ha tratado con amabilidad y jalar el gatillo mirándole a los ojos, ojos con
una expresión de perplejidad y miedo, si ya disparar a la cabeza es clara
intención de matarenseguida le dispara dos veces mas. No, no puedo imaginar que
alguien sano mentalmente pueda hacer eso, no digo que sea loca, digo que es una
persona con el alma oscura llena de odio.
“Que vivan los
que luchan” grito alguien en su audiencia de formalización ¿luchar porque,
contra qué? Contra inocentes trabajadores, como el vigilante que hoy se debate
por su vida en una cama de hospital, que seguramente tendrá secuelas en su
rostro, que quizás tenga una familia que dependen de él, que en su relativa
conciencia se pregunta por qué él; quizás y solo quizás tenga hasta posiciones
de izquierda democrática y quizás votado por un tal Marcel Claudepero eso no lo
sé, ni lo supo Tamara que en la ceguedad del odio solo vio un uniforme y no una
persona. Vídeo en TVN
Antes se
quejaban de que un vigilante hiciera su trabajo y “defendiera el dinero de los
ricos”, pero ahora ella va y trata de asesinar NO a un RICO, no un megaempresario, no a un miembro de la gobernanza
mundial, ni a un empresario de las comunicaciones, si no a un trabajador como muchos,
como todos ¡Hasta a los revolucionarios lesda contra la clase trabajadora!
Concluyendo: Muchas
veces me eh opuesto a la Ley Antiterrorista, por injusta y desmedida, sobretodo
en casos del llamado conflicto mapuche, porque no ajustan a lo que es la
definición de terrorismo; pero en el acto de Tamara Farías estamos frente 1. Un
acto de venganza política, 2. Afecta a una persona indiscriminadamente 3. Está
destinado a causar terror o miedo en trabajadores bancarios y sociedad 4. Tiene
la intención de ser ejemplo y llamado a la “Lucha”, por lo que se ajusta en su
totalidad a un acto terrorista y es de esperar que así sea tratado o nos
encontraríamos frente a la típica actitud paternalista del sistema judicial
hacia los delitos anarquistas.
Creo que hace tiempo perdieron el norte estos muchachos les paso como en el libro 100 años de Soledad cuando los "liberales" inician una guerra que dura años, y despues ni siquiera se acordaban para que estaban luchando, pese a todo siento lastima por Pitronelo perdio la vista, audicion, y brazos dentro de todo pago en parte el daño que hizo ademas su "compañero" lo abandono y un taxista le apago el fuego, sin mas que agregar saludos
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